jueves, 1 de noviembre de 2012

Un sueño de 26 de diciembre




En la tarde soñé que estaba en mi casa de Oxapampa. Ahora tan nueva luego de la refacción de este año. Era agradable caminar por allí hasta que caía en la cuenta de las luces apagadas y de la oscuridad de la noche. Me daba miedo y volví a nuestra sala llamando a mamá. Luego volvía por mis pasos e iba prendiendo las luces del corredor teniendo la mala conciencia del recibo de luz que llegaría a fin de mes (el miedo a la austeridad de nuestros bolsillos). Aunque todo estaba mejor con las luces prendidas. Llegaba a mi habitación, la habitación que dejé hace 14 años ahora que tengo 28 años. La habitación que deje hace la mitad de mi vida. Entraba allí y me sorprendía que todo conservara su orden. Cogía mi guitarra y la tocaba mientras cantaba. A pesar que rasgaba fuerte sonaba bajito. La guitarra tenía su cuerpo atravesado por la avidez de las termitas.